María. José: ¿Sabes que el otro día oí que decían una cosa de ti?
Emma: Ya lo supongo, ya lo supongo, pero, mira, sabes qué te digo: puf a la espalda.
María. José: ¿Sabes que el otro día oí que decían una cosa de ti?
Emma: Ya lo supongo, ya lo supongo, pero, mira, sabes qué te digo: puf a la espalda.